La última semana del trimestre ha sido movidita. Entre repaso y actividades varias hemos podido realizar una salida al teatro a ver la obra "The Vain Little Mouse" en inglés, celebrar el día de ST. Patrick o realizar una búsqueda de huevos de pascua. Aquí tenéis una cuantas fotos de esos momentos.
Las últimas semanas algunos padres me han expresado su preocupación por los miedos de los peques y por eso estas dos últimas semanas hemos decidido trabajar esta emoción en clase como preámbulo del pequeño proyecto de educación emocional que llevaremos a cabo en el tercer trimestre.
Es frecuente que los niños sufran miedos que en muchos casos no estaban presentes anteriormente. En torno a los cuatro o cinco años estos miedos suelen reducirse a la separación de los padres y a las cuestiones relacionadas con el daño físico y por tanto con el miedo a la oscuridad, los monstruos o algunos animales. Estos y otros miedos entrarán dentro de la normalidad siempre y cuando no impidan que los niños desarrollen su vida y actividad con normalidad.
Para empezar a trabajar esta emoción hemos realizado un análisis de la imagen relativa al miedo utilizando el libro que nos guiará más adelante, el EMOCIONARIO. Hemos ido exponiendo qué elementos están presentes en la ilustración e imaginando qué puede estar pasando hasta llegar a la conclusión de cuál es la emoción que se representa en la imagen.
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Posteriormente hemos pasado a hablar de los que a cada uno nos da miedo y las implicaciones que tiene en nuestra vida (si cruzan solos el pasillo, si duermen solos...). Hemos dibujado nuestro miedo y Eli nos ha regalado unas conchas que hemos encantado con un conjuro para que nos sirvan de talismán quitamientos.
También hemos traído a clase fotos o dibujos de los que nos asusta para dárselo de comer al TRAGAMIEDO, un monstruo muy gracioso y con caries al que le gusta alimentarse de los miedos de los niños para que sean valientes.
El pasado martes nos visitó Paco Sánchez (papá del compañero Pablo, de la clase de los delfines) y junto a sus alumnos del IES Montijo llevaron a cabo un taller de química divertida donde los peques se lo pasaron de miedo. No hay más que ver sus caras para darse cuenta de lo que disfrutan los niños con los experimentos.